viernes, 13 de junio de 2014

La caída del gran dictador

   1- La caída del gran dictador llegó, y mucho más temprano de lo que se esperaba. Tan dramático como suena, así fue el debut de la campeona, de la dueña del trono mundial, quien recibió una descarga de humildad y de esfuerzo por unos valientes soldados vaangalistas trajeados de vendetta y de deseo de pintar una nueva historia, y es que Robben lo dijo: “Llevo cuatro años yéndome a dormir con aquella pesadilla de Johannesburgo”, sí, ya saldrá el radicalista a decir que en 2010 era una final y hoy solo un partido de grupo, pero lo que ocurrió en Salvador fue un movimiento telúrico en los cimientes de España.

2-    La inserción de Costa en el once inicial demostró lo urgente que está España de una renovación. El brasileño naturalizado, hoy habló portugués mientras que el trivote central hablaba catalán, español y vasco. Sin Koke y sin un acompañante en la delantera que le arrastre la marca, Costa se mostrará incómodo y sin ningún chance de evolución. Hoy las dos que tuvo – Gracias al genio Iniesta – lejos quedaron de ser aprovechadas. De Vrij disfrutó un montón las ingenuidades asociativas de Costa.

3-    Holanda no jugó un buen primer tiempo, pasó la mayoría de los minutos saltándose líneas y buscando con pelotazos a RVP, y lo único que encontraba era perder la posesión y no ocasionar ningún peligro. El penal dudoso fue lo mejor que le pudo pasar a ‘Los ciudadanos de los países bajos’, a partir de allí, De Guzmán y De Jong dieron un paso al frente, desapareciendo del campo a la versión más gris de Sergio Busquets y nula de Xavi Hernández. Cuando se somete la medular a España, las bandas no son opciones claras de ataque. Azpilicueta, el reconvertido, se va por lo sano, defender su zona y evitar los desastres a sus espaldas, y Alba nunca aprovechó el espacio que Holanda dejó por la izquierda.

4-    El fútbol es ánimo, fe y coraje. En ese orden. El empate supersónico de RVP, le abrió la puerta a la esperanza, ese ingrediente indispensable para construir hechos inolvidables. La génesis del empate holandés fue casi el 2-0 de España, desnudando el mapa táctico de Van Gaal. Corte en el fondo y en dos pases estar por la zona de los aleros. Centro y gol. A partir de allí, llegaría el bombardeo de ‘Los ciudadanos del los países bajos’, fútbol. Orden. Paciencia y una eficacia alarmantemente constante.

5-    España se fue al descanso limpiándose la sangre que le dejó el bofetón de RVP, pero ni el más negativo de todos los catalanes – Y vaya que hay bastantes – se podría imaginar la desgracia, la humillación, la lección de fútbol y sobre todo, la caída estrepitosa que sufrirían los reyes del mundo. Blind, De Vrij y Martins fueron tres gandolas que surtieron de espacios a través de diagonales a Robben, el eje de la vendetta, quien se juró nunca fallar de nuevo frente a Casillas. Dos goles lleno de catarsis, de limpieza del alma, de Namasté, que le permitirán a Robben ver lo que resta del mundial con otra disposición, y es que de eso se trata el fútbol, de recordar las miserias del pasado para transformarlas en grandezas del hoy.

6-    Del Bosque tiene mucho trabajo por delante, y la parte principal de la revolución será devolver la sangre a los ojos de sus jugadores. El talento no lo es todo, y menos en un Mundial, que reúne la ilusión de centenares de portadores de fe. La intensidad se quedó en Lisboa, en Can Barca y en la Cibeles. Hoy la campeona del mundo fue una película de drama, de suspenso y de mucha angustia. El reloj de arena comienza su andar, y si la metamorfosis no llega, el final estará cerca, muy cerca. ¿Será la nueva versión de La Maldición de Lippi en el 2010?

…y 7- Holanda puede ser herida, pero también tiene herramientas para hacer mucho daño, y si su tridente de la gracia: Van Persie, Robben y Sneijder siguen con sangre en sus ojos, las oportunidades irán in crescendo y lo que se presume en un proceso de renovación, podría saltarse las etapas y quedar en una nueva historia de amor de la Naranja Mecánica. El eterno subcampeón. Hoy pisaron el yugo monárquico y sepultaron las jerarquías. Hoy fueron fútbol, y hoy derrocaron al gran dictador.


Geoff I. Hernández

No hay comentarios.:

Publicar un comentario